Mejorar la dieta y el estilo de vida es fundamental para reducir el riesgo cardíaco y el accidente cerebrovascular en la población general.
Comer más frutas y verduras puede reducir el riesgo de accidente cerebrovascular (ACV) en todo el mundo, según concluye una nueva investigación que se publica esta semana en ‘Stroke: Journal of the American Heart Association’.
Sus autores realizaron un metaanálisis de 20 estudios publicados en los últimos 19 años para evaluar los efectos de la ingesta de frutas y verduras en el riesgo de accidente cerebrovascular a nivel mundial. En todos los análisis participaron 760.629 hombres y mujeres que sufrieron 16.981 accidentes cerebrovasculares.
El riesgo de ACV se redujo en un 32 por ciento con cada 200 gramos de fruta consumida cada día y un 11 por ciento por cada 200 gramos de vegetales que se ingirieron a diario. «Mejorar la dieta y el estilo de vida es fundamental para reducir el riesgo cardiaco y el accidente cerebrovascular en la población general», aconseja el autor principal del estudio, Yan Qu, director de la unidad de cuidados intensivos en el Hospital Municipal de Qingdao y profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de Qingdao, en China.
«En particular, es muy recomendable una dieta rica en frutas y verduras, ya que cumple con las necesidades de micronutrientes, macronutrientes y fibra», agrega. Los macronutrientes (carbohidratos, proteínas y grasas) aportan calorías o energía y nuestro cuerpo necesita pequeñas cantidades de micronutrientes como vitaminas y minerales.
Este investigador hizo alusión a estudios que demuestran que el alto consumo de vegetales y fruta puede disminuir la presión arterial y mejorar la función microvascular, además de que tiene efectos favorables sobre el índice de masa corporal (IMC), la circunferencia de la cintura, el colesterol, la inflamación y el estrés oxidativo.
Los efectos beneficiosos de las frutas y las verduras se aplican de manera coherente a hombres y mujeres, el pronóstico del accidente cerebrovascular y por tipo de accidente cerebrovascular (causados por coágulos o hemorragia). Los científicos no encontraron diferencias significativas en el efecto de la edad (menor o mayor de 55 años).
Los expertos ajustaron los resultados del estudio a factores como el tabaquismo, el alcohol, la presión arterial, el colesterol, la actividad física, el índice de masa corporal y otras variables dietéticas y combinaron los resultados de seis estudios de Estados Unidos, ocho de Europa y seis de Asia (China y Japón).
POCO CONSUMO EN LOS PAÍSES EN DESARROLLO
Estos análisis señalan que el bajo consumo de frutas y verduras es prevalente en todo el mundo y, especialmente, en los países de bajos y medianos ingresos. Aumentar el consumo de frutas y verduras hasta 600 gramos cada día podría reducir la carga de ictus isquémico en un 19 por ciento a nivel mundial, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En China, el accidente cerebrovascular es la principal causa de muerte, con una estimación de 1,7 millones de personas que murieron por este motivo en 2010. En Estados Unidos, el accidente cerebrovascular la causa número cuatro de muerte y el principal motivo de discapacidad.
La Sociedad Americana del Corazón recomienda que el adulto medio coma entre cuatro y cinco porciones de frutas y verduras todos los días como base de una dieta de 2.000 calorías. Una dieta rica en una variedad de colores y tipos de frutas y verduras es una manera de obtener los nutrientes importantes que la mayoría de las personas no obtienen de forma suficiente, incluyendo vitaminas, minerales y fibra dietética, además de ser naturalmente bajo sen grasas saturas.
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