Una fácil técnica para hacer que los niños coman correctamente,  es mezclando alimentos que le gusten, con alimentos que le cueste consumir.

Por lo general, para que los niños coman con mayor variedad debemos intentar  combinar alimentos de mayor agrado con alimentos menos apetitosos o nuevos.

Si de repente le presentamos un plato de verdura que no le gusta o que nunca a probado, y todas las verduras que añadimos en el plato son verdes……difícilmente nuestro pequeño va a probarlo y aun menos va a comer una gran cantidad.

Pero, si en un mismo plato de verduras, mezclamos varios colores, verde de las judías, naranja de la calabaza y gris de los champiñones y a la vez, todos los alimentos tienen diferente textura, facilitaremos que el niño consuma una mayor cantidad de alimentos.

Esta técnica la podemos hacer día tras día, pero nunca debemos  dar a nuestro niño una «recompensa» por haberse comido un plato que no le gusta. Porque habitualmente esas recompensas son muy calóricas, con mucha grasa o azúcar. Debemos intentar que entienda que hay que comer de todo pero sin nada a cambio.

Así pues,  un ejemplo sencillo es esta  receta. Que haremos que nuestro pequeño consuma una pieza de fruta, ya sea como postre o en la merienda, de manera divertida y apetitosa.

!La manzana con visitante!

Ingredientes:

• manzana
• gusano de caramelo

Elaboración:

• cortamos por la mitad la manzana y en un extremo hacemos un agujero
• introducimos el gusano por el agujero