Señalan que el régimen  no tiene base científica y puede causar problemas cardiovasculares.

Quienes aún  no sabían nada del método Dukan para adelgazar, comenzaron a oír de él cuando se le asoció a la buena figura de Kate Middleton, Caritina Goyanes o Penélope Cruz. Los libros del nutricionista francés Pierre Dukan  ya eran ‘superventas’ por Sant Jordi, pero ahora basta con revisar la lista de los más vendidos de ‘no ficción’ de la cooperativa Abacus, por ejemplo, para ver que los dos primeros textos de la lista se refieren al método. El tercero más vendido es Indignaos, y el cuarto, de nuevo, lleva el sello Dukan.

Se trata de la más reciente ‘dieta milagro’ que se pone de moda al calor de la operación bikini, pero en esta oportunidad ha tenido una respuesta contundente de la Asociación Española de Dietistas y Nutricionistas (AED-N), que la califica de «ilegal y fraudulenta», y  advierten que propone un régimen alimenticio que «no sirve para adelgazar y supone un riesgo para la salud pública».

Más riesgos que beneficios.

La doctora Nancy Babio, dietista-nutricionista  y profesora asociada de la Facultad de Medicina de la URV, es una de las autoras del estudio de la AED-N. Explica que «es una dieta carente de fundamento científico, no hay ningún estudio que o que avale su eficacia ni su seguridad. Sin embargo, como los resultados iniciales

Doctora Nancy Babio Sánchez

una disminución  del peso en la báscula, la gente cree que está adelgazando. Y no es lo mismo disminuir el peso en la báscula que realmente adelgazar. Con este tipo de dietas milagros, lo que perdemos es agua y masa muscular, y de allí a que se perciba una disminución en la báscula. Sin embargo, cuando se la abandona se recupera no sólo el peso perdido, sino que se recupera, en lugar de masa muscular, masa grasa, y esto ocasiona que cada vez cueste más perder peso».      

Pero igual que sus colegas, Babio señala que los problemas de este régimen, basado en un gran consumo de proteínas (no se come otra cosa los primeros días), no estaría sólo en su poca eficacia en el tiempo, sino en  que puede ocasionar problemas de salud: «Esta dieta desequilibrada, donde sólo se ingieren proteínas, aumenta el riesgo de

padecer alteraciones somáticas, psicológicas, de rendimiento e incluso se ha asociado con  aumento de la mortalidad total. Es por ello que ninguna institución de referencia o grupos de expertos en nutrición dan soporte a este tipo de dietas. La Organización Mundial de la Salud es contundente con este tipo de dietas y  considera que no hay evidencias de eficacia ni de seguridad a largo término sobre dietas hiperproteicas y pobres en carbohidratos. Por otra parte, la Asociación Americana del Corazón advierte de sus potenciales peligros».

El ‘boca a boca’

Pero, a pesar de las contundentes advertencias, son muchos los que se declaran fieles seguidores de este régimen. La Organización de Consumidores y Usuarios, OCU, por ejemplo, se hizo eco de la denuncia de los nutricionistas. En su página web hay al menos diez comentarios, todos defendiendo el régimen. Pasa lo mismo con el resto de medios de comunicación que se hacen eco  de la posición de los nutricionistas: hay multitud de mensajes de quienes aseguran estar adelgazando.

Lo que no hay que perder de vista, asegura Babio, es que es imprescindible consultar al especialista antes de comenzar éste o cualquier otro régimen: «Es sumamente importante que un profesional valore el estado de salud y determine si es necesario que esa persona pierda peso. Si bien muchas veces es obvio el sobrepeso u obesidad que se padece, es necesario determinar si además existe una enfermedad asociada a este sobrepeso que requiere otros cuidados» señala.

Deben tener especial atención los pacientes con obesidad, que a juicio de Babio son muy vulnerables a «engancharse» a dietas de moda que ofrecen resultados mágicos. Estas dietas se suelen hacer insostenibles en el tiempo y al abandonarlas, la persona gana aún más peso.