Estilo de vida de los españoles

Más del 40 % de los adultos en España no hace ejercicio en su tiempo libre, según señala un informe de Sanidad sobre las tendencias de los principales factores de riesgo de las enfermedades crónicas, en el que se advierte además de un aumento en casi un 4 % de la frecuencia de la obesidad.

Se trata de un informe del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, al que ha tenido acceso Efe, en el que se observa la evolución de los últimos 10 años de la prevalencia del tabaquismo, la inactividad física, la obesidad, el consumo de frutas y verduras y el de alcohol en cantidad de riesgo para la salud.

En lo que se refiere al ejercicio físico las cifras no dejan lugar a dudas: Más del 40 % de la población adulta española se declara inactiva en su tiempo libre, y más las mujeres (49,9 %) que los hombres (39,0 %), una diferencia que se hace más palpable en las edades más jóvenes (16 a 24) y más avanzadas (65 y más).

Los contrastes también se aprecian entre personas con más y menos estudios. La prevalencia de la inactividad en 2012 era casi un 60 % mayor en las personas con menos nivel de estudios, aunque en 2001 era del 70 %.

Las comunidades donde se hace menos ejercicio físico son Cantabria y Murcia, y en las que más en Navarra, Rioja y Asturias, y entre ambos grupos hay una diferencia considerable (31 %), que además ha ido aumentando en el tiempo, pues en 2001 era de un 22 %.

Otro factor de riesgo que preocupa es la obesidad, cuya frecuencia ha aumentado en el periodo de 10 años analizado en un 3,8 % (2 en mujeres y 5,7 en hombres), un ascenso que se ha observado de forma continuada, excepto en las mujeres, en las que se apreció un ligero descenso entre 2006 y 2009.

Además, esa tendencia ascendente se observó en todos los grupos de edad y sexo, excepto en las mujeres de 45 a 64 años, en las que la prevalencia se redujo un 2,6 %.

Y de nuevo, los que tienen menos nivel de estudios son los que tienden más a la obesidad y es de destacar una circunstancia: la prevalencia es cuatro veces mayor en las mujeres con estudios primarios o inferiores, que en la de aquellas con estudios universitarios; en los hombres fue sólo dos veces superior.

Los municipios más pequeños registraban en 2001 más casos de obesidad, mientras que en 2012 ocurría lo contrario.

Los españoles somos más obesos y comemos, además, poca fruta. En 2012, el 28,6 % de la población adulta declaró un consumo insuficiente de frutas y verduras, un porcentaje que era del 30,5 % en 2001, del 22,4 %, en 2003 y del 24,1 en 2006.

El menor consumo lo hacen los hombres -en 2012 el consumo insuficiente era del 33 % en ellos y del 24,4 en ellas- y los jóvenes casi consumen el doble menos que los adultos, una diferencia que cada vez va en aumento. Las personas con menos nivel de estudios son de nuevo las que peor paradas salen en este aspecto.

Menos consumo de alcohol y tabaco

En cuanto al alcohol, el porcentaje de consumidores de una cantidad que supone un riesgo crónico para la salud era del 1,2 % en 2012, mientras que en 2003 era del 4,1.

El porcentaje de mujeres bebedoras de riesgo se redujo del 1,5 % en 2003 al 0,3 % en 2012, mientras que en hombres esos porcentajes fueron 6,9 y 2,1, respectivamente.

Además, en los hombres se ha observado un importante descenso en el número de bebedores de riesgo: en 2003 eran casi un 10 % de los se encontraban entre 45 y 64 años, y en 2012 un 3 %.

Los que tienen menos estudios también consumen con más riesgo que los universitarios: un 4,3 % frente 1,6 %, respectivamente en 2012.

Los fumadores también han descendido, ya que el porcentaje de ellos era en 2001 del 34,5 % y en 2012 del 27,1 %. Las mujeres pasaron del 27,3 % al 22,9 y los hombres del 42,2 al 31,6.

En los hombres, ese descenso se observó en todos los grupos de edad, mientras que en las mujeres sólo en las menores de 45 años. También son menos los grandes fumadores (veinte o más cigarrillos al día) ya que han descendido del 11 al 8,3 % en el periodo analizado.

Los hombres con menos estudios fuman más, pero en el caso de las mujeres no se puede decir exactamente lo mismo porque depende de la edad: en las menores de 45 años fuman más las que tienen estudios más bajos, sin embargo en las mayores de esa edad cogen más el pitillo las que tienen los estudios más altos.

Para el informe, el Ministerio ha utilizado la información de las encuestas nacionales de salud realizadas entre 2001 y 2011/12 y en concreto datos de entrevistados de 16 años de edad y mayores.

Enlace de la notícia:

http://www.elmundo.es/salud/2013/12/11/52a88dbf63fd3d7f2b8b4577.html

Leave a Response

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.