De aspecto muy similar a las fresas, pero con un tamaño superior, el fresón conocido científicamente como Fragaria ananassa es una fabulosa fruta con propiedades muy diversas .
Su composición nutricional se basa en una elevada cantidad de agua, como corresponde a todos los vegetales. Por ello, tan solo aporta 27 kcal por cada 100 g. de este fruto.
El 80% de los nutrientes corresponde a hidratos de carbono, aportando a su vez, casi un 10% de proteínas.
En cuanto a minerales, existe una elevada cantidad de potasio, que interviene para que haya una correcta contracción muscular, esencial para el buen funcionamiento del corazón. Y otros minerales destacados son el fosforo y el calcio, que actuando conjuntamente, ayudan a que el calcio se adhiera mejor al hueso, provocando así, una mayor densidad ósea.
Como vitaminas a destacar tenemos el beta- caroteno, que se transoforma vitamina A en la mucosa del intestino, que ofrece al fresón ese peculiar color rojo. Se ha estudiado que esta vitamania ayuda a reducir la prevalencia a ataques cardíacos, el cual funciona como antioxidante y aumenta la eficiencia del sistema immunitario.
Entre otras vitaminas se encuentra la vitamina C; que es un gran antioxidante que nos ayuda a eliminar radicales libres y el acido fólico; vitamina hidrosoluble indispensable para la formación de hemoglobina y proteínas estructurales.
Los fresones, las podemos comer tal cual o podemos hacer sencillas preparaciones culinarias como puede ser un batido de fresones con leche, o mezclar yogur con fresones o una simple y nutritiva macedonia de frutas.
Disfruta del fresón aprovechando todos sus nutrientes ya que es una fruta de temporada.